La ausencia como conferenciante de Gustavo Martínez, CEO de JWT, fue suplida por la organización por un debate entre los presidentes de los jurados de El Sol. A pesar de que los premios aún no eran oficiales y no tenía sentido hablar de palmarés, la cita resultó más interesante de lo esperado por lo debatido de los temas introducidos por Jordi Palomar, director del festival y la diversidad de opiniones.
El primer tema fue de choque: la profusión de las aristas sociales en las campañas actuales. En general, todos destacaron que las marcas pueden hacer una labor social con sus campañas, pero el peligro es que no sean sinceras. En este sentido, Humberto Polar (Mayo Draft FCB Perú) cómo los estudios demuestran que en este tipo de argumentos la gente no cree en la sinceridad de las marcas. También interesante la aportación de Carlos Bayala (Madre Wolrwide), quien destacó que si entras en ese terreno no se trata de contar lo bueno que haces sino que todo lo que haces tiene que ser bueno. Más cínica la posición de Martín Mercado (Y&R Argentina), quien afirmó que las marcas son grupos de personas y como tales no se les puede pedir que sean mejores de lo que las personas son. Daniel Solana (Double You) reflexionó sobre que esto ocurre porque las marcas ya no pueden hacerse y mantenerse solo desde las percepciones porque ahora forman parte de la conversación.
Agencias independientes
El siguiente tema fue la pervivencia de agencias independientes en un mundo dominado por redes cada vez más grandes. Como era de esperar, aquí cada uno tiró para su terreno. José Mollá (La Comunidad) defendió la existencia de agencias independientes como algo importante para las marcas. Quienes trabajan en agencias de redes aclararon que dentro de ellas también de puede ganar la indepenencia a partir del esfuerzo y el buen trabajo, por lo que no puede usarse la multinacionalidad comó excusa. Solana nuevamente puso el colofón con una refexión sobre cómo las redes antes eran un referente de cultura corporativa pubicitaria en las que mirarse, mientras que ahora integradas en macro grupos, son algo indifereciado. La cultura de agencia se ha quedado para las independientes.
Los dos temas finales aterrizaron en el mundo de los festivales: la necesidad de reconducir la proliferación de secciones y la escasez de grandes premios. En el primer punto parece que las opiniones se inclinaban hacia una reducción, pero nuevamente Carlos Bayala puso el contrapunto al decir que formatos como las vallas de exterior están perdiendo calidad y necesitan ser piezas que funcionen por sí mismas, independientemente de que formen parte de una campaña integrda.
En cuanto a la escasez de grandes premios, unanimidad en la explicación: hubo buenos oros pero o no hubo piezas que destacaran sobre el resto o no hubo unanimidad en la percepción de cuál lo merecía. O ambas cosas.