El Salón Inmobiliario Internacional de Madrid (SIMA) le pone buena cara al mal tiempo. Aunque soplan vientos de recesión para los más optimistas, y de clara crisis para los más agoreros, y a pesar de que todo ello tiene mucho que ver con la desaceleración del, a todas luces, disparatado crecimiento del mercado inmobiliario en las últimas décadas (y de las hipotecas), los responsables de esta feria que cierra sus puertas mañana, han vuelto a apostar por el humor para invitar a visitarla.

De nuevo El Laboratorio S&J se ha encargado de desarrollar la campaña de comunicación para dar a conocer la celebración de esta feria que, en su décima edición se ha movido entre la crisis, el menor número de asistentes, la fuerte presencia de ofertas de otros países y buenas dosis de imaginación por parte de las empresas para incentivar las transacciones.

El humor ha vuelto a ser el hilo conductor de la campaña. Si en la pasada edición el protagonista del spot era un hippy poco menos que acorralado por el resto de sus conciudadanos que no entendían como alguien podía optar por vivir sin un techo sobre su cabeza (con lo fácil que resulta adquirir una vivienda en el SIMA, debía ser el cierre del argumento), en esta ocasión la trama se desarrolla en un patio de vecinos y refleja las difíciles relaciones que a veces se establecen entre los habitantes de un mismo edificio, pero sin perder el humor. Armado con un megáfono, uno de ellos relata al resto las interioridades más perversas de sus convecinos. ¡Con lo fácil que resulta cambiar de casa!, cierra el spot. Basta con visitar el SIMA.

Al mal tiempo, buena cara.