Como se recordará, Toni Segarra ha sido el primer publicitario en los veinte años del Club de Creativos en recibir el CdeC de Honor en solitario y el primero que sigue plenamente en activo, pese a que hace casi dos años salió de SCPF, agencia de la que fue cofundador. Pero no queda ahí la cosa. Con la designación de Segarra como CdeC de Honor 2019, el galardón nacido para devolver a quienes contribuyeron de forma evidente al lustre de esta profesión un poco de ese brillo a través de la memoria, también da un giro inesperado para mirar al futuro.
Porque, ¿habrá alguien entre las nuevas generaciones (de las que se incorporan ahora al mercado laboral o de las que todavía están estudiando) que no sepa quién es Toni Segarra?
Por si acaso, traemos aquí el vídeo resumen realizado por sus colegas de profesión y que se proyectó en la gala de los premios CdeC antes de entregar el galardón al creativo, que incluye algunos de los trabajos asociados irremediablemente a su quehacer. “El vídeo”, dijo, “me podría servir de carpeta, ahora que soy freelance. Sobre todo, porque como todas las buenas carpetas, está llena de trabajos que no son míos”.
Segarra no dudó en señalar que este ha sido el premio más importante recibido en su vida (y hay que decir que lleva unos cuantos a sus espaldas); agradeció a clientes, familia y colaboradores más directos (Luis Cuesta, José María Piera y David Caballero) y, en ese punto de premio inspirador que ha adquirido el CdeC de Honor, recordó que el oficio del creativo es sobre todo el de vendedor –“somos de la estirpe del vendedor de alfombras en el bazar de Estambul”- y destacó la importancia del trabajo del publicitario en la creación de riqueza y valor. Sin duda, mensaje/lección para los que llegan.
