See It Be It es una iniciativa de Cannes Lions para acelerar el talento femenino y no binario, dado que la mayoría de los puestos de liderazgo en publicidad siguen siendo ocupados por hombres. En esta edición, dos profesionales españolas, Meritxell Ruiz (VML) y María Carrillo (David Madrid), han participado en el programa, y aquí cuentan su experiencia.
Un lugar para todas (Meritxell Ruiz, directora creativa en VML)
Aunque te lo dicen, siempre es difícil de creer.
“Os va a cambiar la vida”, nos dijo Ángela Pacheco en el DíaC.
Hacía cinco meses que sabíamos que habíamos conseguido ser unas de las diecinueve personas que iban a formar parte del Cohort 2024, entre más de 1.400 solicitudes de todo el mundo. Por primera vez en la historia, dos creativas españolas se colaban a la vez en SIBI. Dos socias de Más Mujeres Creativas y ambas, un claro reflejo de lo que UnaDeDos ha hecho por nuestra industria.
Pero nada nos preparó para lo que pasó durante la semana en Cannes. Conocimos (he hecho números) a 34 mujeres de todo el mundo durante el programa que vinieron a hablar con nosotras de varios temas: charlas sobre cómo liderar “sin liderar como un hombre”, sobre cómo negociar, sobre cómo evitar el burn-out, sobre la importancia de las relaciones emocionales y el cuidado con los equipos, y sobre la importancia de las palabras. Estuvimos en salas de jurado, en la del Glass Lion, con Cindy Gallop como presidenta, y en la de Film con Tor Myhren.
Sé que esas oportunidades son únicas, pero para mí, que toda la vida he buscado conexiones genuinas, lo mejor fue lo que ocurrió en nuestra pequeña habitación en el sótano del Palais: allí se creó el espacio más mágico y vulnerable en el que he estado nunca. Un lugar en el que todas las voces eran escuchadas, todas las preocupaciones atendidas, y en el que siempre hubo palabras de apoyo para empujarnos entre nosotras. Porque, vinieras de donde vinieras, compartíamos las mismas barreras, los mismos problemas.
Como dijo Cindy en su charla: “The biggest barrier in our industry is insecure men”, y todo el Teatro se levantó a aplaudirla (yo le dije“ dilo tata”). Y es que es muy difícil crecer en entornos en los que no se celebra tu personalidad activista, por eso ver a tantas capas en esos escenarios era tan importante para nosotras; eso nos dio aún más voz.
Entrar en See it Be it, hacerlo entre diecinueve mujeres increíbles y ganar un león (gracias, Adri, por ese Use of Humour) es algo que solo se vive una vez en persona, pero mi misión es hacer que todas las personas de esta industria conozcan el programa (que ha celebrado diez años). Sobre todo, los hombres en posición de poder, para que el trabajo de impulsar el talento femenino+nb no solo recaiga en las mismas de siempre. Porque si solo tenemos a cis-hetero-men en posiciones de poder, las ideas serán eso, básicas.
Todo el mundo quiere ganar un león, pero en Cannes vemos cómo es la diversidad de equipos, de talentos, de personas, de culturas lo que hace que las ideas sean ricas. Así que… no sé a qué están esperando para hacer un poco de lugar a la diversidad.
A mis SIBIlings, aunque algunas tengáis que usar ChatGPT para entender esto, ahora sabéis que siempre habrá alguien en el mundo apostando por vosotras y siendo vuestro altavoz (snaps fingers). Y esa es la magia de See it Be it, del feminismo y de Más Mujeres Creativas: espacios en los que no hay lugar a la competitividad, es el significado de sororidad en su máxima esencia para entender que estamos aquí para empujarnos entre nosotras.
Y a todas las creativas, planners, producers, directoras y artistas, hay un lugar para vosotras en See it Be it, porque aunque en España parece que aún no lo sepan, en Cannes son conscientes de que no llegaremos a lo mejor de la creatividad hasta que estemos todas.
Sororidad (María Carrillo, directora de arte sénior en David Madrid)
Cando me dijeron que de más de 1.400 solicitudes (el doble que en años anteriores) era una de las seleccionadas para el programa See It Be It de Cannes Lions, experimenté el efecto del síndrome del impostor más grande que había tenido en toda mi vida. Era extraño, he trabajado toda mi vida al 200%, he logrado casi todo lo que me he propuesto y, aun así, una voz en mi interior me recordaba el vértigo de ver mi nombre entre esas otras dieciocho jefazas.
See It Be It es un programa organizado por Cannes Lions durante la semana del festival, en un aula exclusiva y acordonada dentro del Palais, donde tuvimos diferentes sesiones con principales líderes femeninas de todo el mundo, e incluso acceso backstage y a sesiones de jurados. A lo largo del programa, se nos animó a presentar nuestro yo auténtico: lo que nos motiva, lo que nos enfada, lo que nos frustra. Todas nos sinceramos sobre nuestra vida personal y profesional y nos dimos cuenta de que, a pesar de venir de partes del mundo totalmente diferentes, todas compartíamos los mismos problemas laborales, de conciliación, de igualdad de oportunidades; sin importar si eres CD, ECD o CCO. En esa semana vivimos una experiencia increíble, exclusiva e irrepetible, y volvimos a casa con varios aprendizajes:
El poder de la sororidad
La mayoría de las mujeres del programa hemos contado con escasos referentes femeninos, lo cual, de manera subliminal, sugiere que es muy difícil que podamos llegar a serlo.
Se nos ha enseñado a competir, es algo que podemos observar en películas, series, literatura, incluso comentarios en redes sociales. Asumimos esta competitividad en el trabajo, donde, si solo una de cada diez posiciones de dirección es ocupada por una mujer, sentimos la necesidad de luchar entre nosotras por ese puesto. Nos convertimos en nuestras peores enemigas, y a quienes disfrutan del privilegio de ser hombres y no desean perderlo, les resulta conveniente que esto continúe de esta manera.
‘How to lead like you’
El otro gran aprendizaje que me llevo es la puesta en valor de mí misma. Es fácil caer en la trampa de intentar imitar a los referentes masculinos, apagar tu personalidad, tu fuerza, callar a la voz interior que te mueve y encajar en un molde para llegar a una posición de liderazgo que creemos (erróneamente) que no nos pertenece. Rodearnos de los compañeros correctos, buscar dónde sí y dónde no, entender que es el lugar el que no encaja contigo y con tus valores, y no al revés. Hemos descubierto (o estamos en ello) quiénes somos y qué queremos, a qué voz interior hacer caso, y qué herramientas usar para conseguirlo.
Cambiar la industria empieza haciendo preguntas
Uno de los highlights de mi semana fue conocer a los miembros del jurado de Glass: The Lion for Change. Fue muy emocionante vivir en primera persona cómo debatían los criterios para que una campaña fuera merecedora de un Glass Lion, pero sobre todo, fue increíble ser testigo del valor y excepcionalidad que puede aportar un jurado en el que están presentes distintas nacionalidades, etnias, edades, géneros, identidades y habilidades. Me hizo preguntarme cómo sería un festival de Cannes Lions en el que el mismo criterio de diversidad a la hora de seleccionar miembros en un jurado aplicara no solo a la categoría del cambio, sino a todas las demás. ¿No encontraríamos la verdadera excelencia creativa en esa diversidad? Fue una pregunta que hizo pensar a la mismísima Cindy Gallop, presidenta del jurado, que prometió abrir ese melón con la organización. Y pensar que mi voz interior estuvo a punto de impedirme hacer la pregunta…
Después de esta semana, me siento más fuerte, me siento vista, capaz de hacer frente a cualquier reto, y tendré a dieciocho hermanas de todo el mundo a mi lado, listas para luchar y abogar por mí en cualquier circunstancia. Siento que he encontrado mi propósito, aunque realmente siempre estuvo ahí. See It Be It ha llegado a nuestra vida como un tsunami.
Una gran ola de esas que te atrapan, te dan la vuelta, te destruyen y te hacen vomitar, pero también te curan, juntan los millones de pedazos en los que estabas y te dirigen hacia la costa que, lo supieras o no, necesitabas alcanzar.
Estos artículos se publicaron originalmente en el Nº 1710 de 'Anuncios'
