Anuncios ha incorporado a su sección Creatividad el apartado Recomendaciones de la Fundéu destinado a mejorar el uso del idioma español en las campañas publicitarias. Esta colaboración desinteresada nace del convencimiento compartido de que la publicidad es un ámbito fundamental para los objetivos de la Fundéu, objetivos que merecen todo nuestro apoyo.
Una vez al mes publicaremos una recomendación seleccionada por Anuncios de entre las muchas que elabora la Fundéu cada año, como parte de su tarea de ayudar a quienes trabajan con el idioma español --periodistas, escritores, publicitarios...-- a resolver sus dudas al respecto y perfeccionar su uso. Su página en internet, que desde hace unas semanas incluye la Wikipedia del español, es una de las más útiles para estos menesteres.
Todos los profesionales publicitarios saben de la capacidad de sus mensajes para transmitir conceptos, ideas o tendencias de forma muy eficaz. Por eso es importante que no transmita usos impropios de la lengua. Al tiempo, como profesión que tiene en la creatividad uno de sus principales aliados, la publicidad es un campo proclive a la innovación tanto en los recursos gráficos como textuales de los anuncios. Pero la creatividad no debería poyarse en utilizaciones indebidas de la lengua hablada o escrita que puedan extenderse y consolidarse por culpa de la potencia de la comunicación publicitaria. Con la idea de favorecer la consecución de ese objetivo, nace esta colaboración, que en el futuro podrá extenderse a otras actividades.
Antiarrugas, no antiedad
El primer consejo de Fundéu recogido por Anuncios es la recomendación de que cuando se hable de tratamientos rejuvenecedores se utilicen las palabras antiarrugas, rejuvenecedora o antienvejecimiento y se evite el término antiedad.
El término antiedad se utiliza refiriéndose a lo que en inglés sería anti-aged y anti-aging y como anti es un prefijo de origen latino que significa oponente o contrario o que protege, previene o lucha contra algo, en este caso, estaría mal empleado pues no se lucha contra la edad, sino contra los efectos que produce. La Fundéu añade que el prefijo anti se debe usar sin guión y sin espacio al nombre al que se adjunta, por lo que no debe escribirse ni anti-arrugas, o anti arrugas, ni anti-envejecimiento, o anti envejecimiento.
Por ello, la Fundación del Español Urgente aconseja que cuando se haga referencia a esos productos estéticos o médicos se utilicen los términos crema antiarrugas o crema rejuvenecedora y tratamiento antienvejecimiento.