Por fin hemos vuelto a ver un Mobile World Congress con gente, mucha gente. El primer año sin mascarilla ha sido todo un éxito y realmente hemos notado que queríamos un Mobile como los de antes. Para celebrarlo, las marcas lo han agradecido trayendo una gran cantidad de novedades y productos destacados. Una edición que no ha defraudado a nadie.
Mas allá de las tendencias de este año, que luego repasaremos, las grandes triunfadoras han sido tanto las gafas de tecnologías inmersivas (realidad aumentada y realidad virtual) y las pantallas flexibles, pero sobre todo las extensibles. Todo ello sin olvidar algunas ‘perlas’ que hemos encontrado de la utilidad real de la inteligencia artificial. Por fin todas ellas ya están aquí. Y han llegado para quedarse.
El MWC 2023 arrancaba con la gran noticia del año (que no estaba en los stands): Open Gateway, la unión entre las grandes telcos (Movistar, Orange y Vodafone) para luchar contra las Big Tech (Microsoft, Google, Facebook, Meta, Apple, IBM y Amazon). Cansadas de invertir en la infraestructura que proporciona la conexión a internet y que luego otras empresas se lucren creando servicios gratuitamente sobre esa conexión, han establecido unos protocolos estándar (API) para que cualquiera pueda desarrollar servicios directamente sobre la red sin necesidad de pasar por las Big Tech. Van a intentar competir contra ellos en su propio terreno. Pretenden evolucionar el concepto de SaaS (software as a service) al de NaaS (network as a service). Aún tenemos que ver si esta interesante iniciativa llega un poco tarde y con todo el pescado vendido, pero puede tener una gran repercusión en los servicios cloud en el futuro.
Las cinco tendencias oficiales que se presentaban en el MWC 2023 han sido: 5G+6G, Digital Everything, OpenNetwork, Reality+ y Fintech.
Las tres primeras muy relacionadas entre sí. Mejorar la velocidad y eficiencia energética de las redes 5G y convertir cualquier objeto personal, profesional o industrial en smart, es decir, conectado a internet y que se comunique con su entorno. El CEO del MWC lo resumía diciendo que en 2023 la digitalización implica pasar de un mundo de bytes (ceros y unos) a un mundo de cosas conectadas. Y una red abierta a través del anuncio de Open Gateway, que hemos comentado.
Retomando el asunto de las grandes triunfadoras a nivel de dispositivos, tenemos que hablar sin ninguna duda, de las gafas. Por fin un metaverso bien entendido y mucho mejor resumido en el concepto de Reality+. Hemos visto también infinidad de usos y aplicaciones que van mucho más allá del gaming y el entretenimiento. Empezamos a notar cómo quieren sustituir al smartphone como dispositivo habitual de nuestra vida cotidiana.
Las grandes marcas han coincidido presentando en el MWC sus modelos de gafas. Aún estamos pendientes de ver cómo convivirán las dos tecnologías inmersivas más relevantes: la realidad virtual (te pones unas gafas y todo lo que ves es artificial y creado digitalmente) y la realidad aumentada (te pones unas gafas y ves tu entorno real vitaminado con contenidos digitales añadiros por encima). Por ahora conviven con bastante paridad y tenemos usos específicos para cada una de ellas. Bajo nuestra opinión, parece que el mercado y los consumidores se decantan cada vez más por la realidad aumentada, pero hemos empezado a ver dispositivos que pueden ejercer ambas funciones. La buena noticia es que a nivel estético estas gafas cada vez se alejan más de un ordenador puesto en la cara y empiezan a parecerse más a unas gafas de sol. Huawei, Xiaomi, ZTE, HTC, Samsung, TLC, Pico, Oppo, Lenovo… todas han traído modelos y prototipos para todos los gustos.
También han sido sorprendentes las pantallas extensibles. Parecía que toda la industria iba a optar por las pantallas flexibles (es decir móviles que se abren y se cierran) pero esta nueva propuesta nos ha parecido excepcional, planteándonos muchas preguntas sobre si es el mejor camino a seguir, en una tendencia clara por tener dispositivos pequeños que pueden crecer en función de las necesidades. Destacan entre el resto las apuestas de Motorola/Lenovo y Samsung. Lenovo ha presentado incluso un ordenador portátil extensible con pantalla retráctil que puede ser un referente para el resto de productos de su categoría. Por su parte, Samsung, exhibía un portátil ‘todo pantalla’ (con teclado digital cuando se necesita) con posibilidad de doblarse como cualquier otro laptop. Interesante también la tableta de ZTE que permite ver imágenes en 3D sin necesidad de gafas.
En relación con las pantallas flexibles actuales, sorprende la propuesta de Huawei, con un móvil que se abre al revés que todos los demás, evitando así la molesta raya intermedia, contando además con un sistema de agarre de mayor comodidad.
Otra ‘perla’ que hemos encontrado en este MWC, -aunque no estaban al alcance de todos-, han sido las sesiones con Microsoft sobre ChatGPT. Inspiración pura. Cuanto más oímos hablar sobre ello, más nos conquista. A través de ejemplos sugerentes hemos podido constatar que la IA no solo sirve para hacer preguntas divertidas y dejar a nuestro cuñado con la boca abierta. Podemos hacerle múltiples consultas: desde que nos explique un documento jurídico hasta que nos haga una propuesta de distribución de maquinaria en una fábrica o que nos genere el discurso comercial de un banco para asociar diversos servicios según el tipo de consumidor. El límite -ni más ni menos´- es solo nuestra imaginación.
Siguiendo por este camino, Union Avatar ha presentado una propuesta muy interesante uniendo la creación de avatares hiperrealistas que pueden interactuar con otros avatares también hiperrealistas conectados a ChatGPT. Y he de confesar que la sensación de estar hablando con una persona humana al otro lado asusta. Es muy difícil diferenciar cuándo se trata de una persona real o una de inteligencia artificial. Para equipos de costumer service o de formación interna, está claro que el futuro pasa por aquí.
La movilidad urbana también ha estado muy presente en esta edición. Liderada por Seawey, hemos visto infinidad de dispositivos conectados que nos permitirán viajar mejor y más eficientemente en las smart cities donde ir en coche cada vez es más complicado. Hemos llegado incluso a ver un taxi-drone autónomo real de SK Telecom, que en 2030 tiene previsto hacer el primer vuelo sin tripulación y únicamente con pasajeros. Ha sido una de las imágenes de estos días.
También nos ha llamado mucho la atención todas las propuestas de i-Health, con la democratización y por fin, implementación de servicios de salud remotos. Robots que pueden operar a una persona desde cualquier parte del mundo. Con las nuevas redes 5G y 6G y su baja latencia, la velocidad de los movimientos es prácticamente el tiempo real y permite que un cirujano de Londres esté operando a un paciente de Nairobi. Exoesqueletos que pueden ayudar a caminar a personas en sillas de ruedas. Una startup capaz de detectar el cáncer de mama solo con saliva. El primer reloj del mercado que es capaz de medir la presión arterial desarrollado por Huawei. O incluso el cono conectado de la DGT que nos avisa cuando nos acercamos a una carretera cortada o en obras. Muchos ejemplos que empiezan a unir la telemedicina, con los wearables y con servicios y aplicaciones que nos van a ofrecer soluciones para el cuidado de la salud y el bienestar, mucho más efectivas.
Hemos disfrutado también con la propuesta que traía el Cruilla, gracias a la cual podías vivir un concierto de Izal como si estuvieras allí físicamente. Una experiencia inmersiva que no solamente se disfruta a través de una vista 360 con las gafas sino en la que, además, intervienen el resto de los sentidos para experimentar el humo de los conciertos, el viento, el sonido ambiente y toda una gama de sensaciones para vivirlo como si estuvieras en lo alto del escenario. En definitiva, una experiencia realmente bien conseguida y sorprendente.
Y, para terminar, y lo he querido dejar expresamente para el final, tengo que citar las novedades en smartphones. Era manifiesto que todas las marcas presentarían sus últimas propuestas top, pero bajo mi punto de vista creo que se han quedado en un segundo plano, en contrapunto con las grandes novedades que nos hemos encontrado en esta edición. Además, influye en este sentido otra variable: y es que empezamos a estar acostumbrados a que cada año las marcas nos presenten teléfonos con más velocidad y mejores cámaras, que le restan al MWC el efecto sorpresa.
Esperamos con altas expectativas la edición del año que viene que confiamos que sea más parecida a esta del 2023 que a las anteriores, primando la implementación práctica a la teoría. Estamos seguros de que la inteligencia artificial, las tecnologías inmersivas y las pantallas extensibles serán algunos de los temas relevantes del 2024.
Que el MWC nos siga sorprendiendo… a lo grande.
