¿Están los festivales como El Sol destinados a desaparecer? es el título de la conferencia en El Sol de Ezequiel Triviño, fundador de Wikreate, y Bernardo Hernández, director mundial de marketing de Google Earth y Google Maps (que trabajó en la presentación, pero no pudo acudir a la cita). En su opinión, los festivales no desaparecerán, pero tendrán que evolucionar al ritmo que marcan los cambios que se están produciendo en el mundo de la comunicación.
“Estoy convencido de que la publicidad va a sobrevivir, pero necesitará reinventarse”, aseguró Triviño. A su juicio, las nuevas tecnologías y el auge del user generated content han provocado que las agencias ya no sean tan necesarias como antes. “Ahora mismo la agencia de publicidad más grande del mundo se llama Google”.
La razón es Google AdWords, cuyo volumen de negocio (16.600 millones de dólares), ya supera ampliamente el del grupo de comunicación más grande del mundo, Omnicom (12.700 millones de dólares). AdWords ha conseguido que los intermediarios ya no sean necesarios, cualquier empresa pueda hacerse sus propias campañas y, en consecuencia, aseguró, “la agencia del montón está condenada a desaparecer”.
“En seis años un intruso del sector ha logrado convertirse en la primera compañía de comunicación del mundo con unas herramientas de la edad de piedra”. Sin embargo, esto también está cambiando. Las capacidades rich media de internet han puesto al alcance de cualquiera la posibilidad de crear campañas atractivas.
Empatía
En el futuro la clave de la buena publicidad será la empatía, “porque si la publicidad se dirige al corazón y se hace bien, el público irá a buscarla”. En ese ámbito, los profesionales del sector parten con ventaja: “Los publicitarios somos maestros en contar historias cortas en formatos audiovisuales”.
Pero a pesar de ello, auguró Triviño, “muy pocas agencias van a sobrevivir a esta avalancha. Lo conseguirán aquellas que mejor entiendan este nuevo escenario. En quince años este festival va a cambiar mucho”. Para empezar, dijo, no se verán conferencias como la que acababa de pronunciar, ante un auditorio que escuchaba atento pero no tenía opción de participar en la charla.