Otras noticias

Reflexiones creativas: 'El instinto'

Y cómo puede beneficiar al trabajo, según Agustín Vaquero

Un tiburón es capaz de detectar la gota de sangre de su víctima a treinta kilómetros de distancia.

Los elefantes huelen los tsunamis tres horas antes de que acaben arrasándolo todo; y parece ser que los delfines lo pueden hacer hasta con tres días de antelación. Las serpientes presienten los terremotos, y los perros son capaces de olfatear cualquier desgracia próxima, varios días antes de que se produzca.

Pero el mecanismo también funciona para lo bueno: las mascotas intuyen el miedo o la bondad del tipo que tienen delante y actúan en consecuencia. A veces los chuchos le cogen tanto cariño a su dueño, que su fidelidad les lleva a dejarse morir cuando les falta.

Eso les pasa a los animales irracionales. A los que no piensan.

A nosotros no. ¿Para qué? Nosotros tenemos pre-tests para saber qué va a pasar y post-tests para saber qué ha pasado.
Nosotros disponemos de complejos estudios de mercado, y contamos con herramientas de precisión, que nos ayudan a saber cómo se van a comportar los consumidores en cada momento.

La evolución de la inteligencia en el ser humano tiene sus riesgos, y la certeza puede que sea el riesgo más peligroso.
Nos hemos ido haciendo mayores pero no sé si hemos sabido crecer bien.

Hemos llegado a la conclusión de que lo importante era ver mucho, pero no tengo claro que hayamos aprendido a interpretar mejor lo que vemos.

Se podría decir que hemos ido ganando en especialización (palabro), pero desgraciadamente ha sido en detrimento del instinto (palabra que vuela).

Algún día aprendimos a sobrevivir, porque habíamos aprendido a jugárnosla con cada decisión que tomábamos. Y aún así, las tomábamos.

Pudimos competir con el resto del mundo, sencillamente, porque confiábamos en nosotros mismos y creíamos que había que actuar de una manera consecuente con lo que pensábamos.

Contaré una anécdota que quizás ilustre mejor lo que quiero decir: una vez tuve que montar en una vieja avioneta que viajaba a unas pequeñas islas que hay cerca de la ciudad de Panamá. San Blas, se llaman esas islas.

No había otra: o volaba con esa avioneta, o lo hacía con otra, igual de insegura, de la competencia.

El piloto (que debía tener unos 60 años), parecía estar ya cansado de tantos vuelos a sus espaldas; y sobre todo, de contestar a tanto turista que le hacía siempre la misma pregunta:

-- ¿Y usted se ha caído alguna vez?

El hombre --con cara de aburrimiento y un poco harto de escuchar siempre lo mismo-- me respondió que sí, que por supuesto se había caído muchas veces. Y al ver mi cara --mezcla de perplejidad y terror-- añadió:

-- Por eso tienes que volar conmigo, chico. Porque me sé caer.

Y no le faltaba razón.

No hay que fiarse del que te promete un resultado perfecto, sino del que se ha caído muchas veces, ha sobrevivido y vive aun para contarlo.

Eso llevado a la vida se llama instinto de supervivencia; y llevado a los negocios, también.

Recuerdo

Por eso no sé yo si con tanto número exacto no nos habremos dejado por el camino lo realmente importante: la curiosa belleza de lo imperfecto.

Eso, que aunque es cierto que no cumple con todas las normas de lo razonable, también es verdad que puede grabarse a fuego en un lugar preferente de nuestro recuerdo; o lo que es más importante: en el recuerdo de los consumidores.
Ahí quería llegar yo, al instinto: esa curiosa mezcla de intuiciones, con aprendizajes, caídas, errores, fracasos y éxitos, que hacen que nuestro trabajo sea un poco mejor cada día.

Si después de todo vivimos para contarlo, seguro que algo habremos aprendido en ese vuelo. Y con lo que hayamos aprendido más un poco de talento y paciencia, igual nos salen un par de buenos anuncios que echarnos a la carpeta.

agustinvaquero@anuncios.com

Tu privacidad es importante para nosotros

Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar nuestros servicios con fines analíticos, para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación y para incorporar funcionalidades de redes sociales. Podrás cambiar de opinión y modificar tus opciones de consentimiento en cualquier momento al volver a esta web y accediendo a la página Política de Cookies.

Panel de gestión de cookies

✓ Permitir todas las cookies
✗ Denegar todas las cookies
Estas cookies son necesarias para que el sitio web funcione y no se pueden desactivar en nuestros sistemas. Usualmente están configuradas para responder a acciones hechas por usted para recibir servicios, tales como ajustar sus preferencias de privacidad, iniciar sesión en el sitio, o llenar formularios. Usted puede configurar su navegador para bloquear o alertar la presencia de estas cookies, pero algunas partes del sitio web no funcionarán. Estas cookies no guardan ninguna información personal identificable.

Cookies técnicas

✓ Permitir
✗ Denegar
Las cookies estadísticas nos permiten contar las visitas y fuentes de circulación para poder medir y mejorar el desempeño de nuestro sitio. Nos ayudan a saber qué páginas son las más o menos populares, y ver cuántas personas visitan el sitio.

Google Analytics

Ver sitio oficial
✓ Permitir
✗ Denegar
Estas cookies pueden ser añadidas a nuestro sitio por nuestros socios de publicidad/medios sociales. No almacenan directamente información personal, sino que se basan en la identificación única de tu navegador y dispositivo de Internet para ofrecerle compartir contenido en los medios sociales o para mostrarte contenido o anuncios relevantes en nuestro sitio web u otras plataformas.
✓ Permitir
✗ Denegar
✓ Permitir
✗ Denegar