Imaginen una empresa de bienes o servicios de consumo sin activos, sin inventario, con ciclos de desarrollo de producto de semanas, con acceso a una enormidad de datos, con inteligencia artificial, conectada 24/7, y con menos de diez años de antigüedad. Ahora imaginen a esta empresa liderando su sector, frente a las grandes multinacionales con décadas de experiencia y miles de millones en facturación.

Si bien es cierto que esto ya no es parte de nuestro imaginario, y tampoco demasiado novedoso, también es cierto es que la tecnología continúa cambiando las reglas del juego y apenas estamos comenzando a ver el principio en unos pocos sectores. Aquí unos ejemplos de lo que ya ha llegado, y de la que está por caer…

• Impresión en 3D: desde juguetes, ropa, alimentos, puentes y hasta órganos humanos, cada vez hay menos cosas que no se puedan imprimir en 3D. Pero más importante aún es que esto ha democratizado la innovación, permitiendo a un innovador imprimir un prototipo desde su garaje a un coste marginal y en una fracción del tiempo.
• Internet of things (Internet de las cosas): desde electrodomésticos hasta armas, el internet ya no es dominio exclusivo de los humanos. Cerraduras y sistemas de alarma pueden abrir la puerta al llegar el dueño a su casa, o la alarma puede ser activada desde miles de kilómetros de distancia con una simple app.
• Modelo peer-to-peer (igual a igual): Uber, Airbnb, Alibaba y otras empresas ofrecen una enormidad de productos o servicios sin inventario, sin activos y con costes operativos mínimos conectando a conductores, dueños de casa o emprendedores con una multitud de consumidores y cobrando una generosa comisión.
• Big data: Los datos eran propiedad de gobiernos e instituciones. Ahora existe una enormidad de datos públicos que, combinados y extrapolados, permiten realizar analíticas sobre, por ejemplo, el factor riesgo de un préstamo bancario. Algo tan simple como el formato del perfil de Facebook de un usuario puede predecir con certeza estadística el riesgo de un cliente.
• Inteligencia artificial: Llamada así porque aprende, la inteligencia artificial permite, por ejemplo, a un termostato regular la temperatura de una casa de acuerdo a las preferencias y hábitos de tráfico de una familia. Sabe cuándo hay alguien en casa y cuándo no, y ajusta la temperatura acorde.
• Blockchain (Cadena de bloqueo): el ejemplo más evidente es la unidad monetaria Bitcoin. Por muy controvertida que sea, es una tecnología que descentraliza el poder de los bancos e instituciones y la pone en manos de las masas. Por cierto, muy trasladable a otros sectores.
• Quantum computing (Computación cuántica): aún en su infancia, pero básicamente un sistema no binario que promete una aceleración monstruosa en el procesamiento de datos. Esto afectará a todo lo mencionado arriba, ya que aumenta su poder y alcance con un efecto exponencial.Repito, nada de esto es particularmente novedoso. Pero sí es posible que el 2017 sea un momento de transición en el que las reglas del juego pasen de cambiar de unos pocos a unos muchos. Y exactamente ¿cómo ha cambiado esto para algunos pocos? Permítanme compartir la cotización bursátil y/o valoración del pasado verano de las nuevas empresas que están liderando en estas tendencias contra los antiguos líderes tradicionales por sector…Los números no suelen mentir, salvo en casos aislados de burbujas. Esto no es una burbuja. Esto es una limpieza profunda de lo que ha llegado y de la que está por caer.

Repito, nada de esto es particularmente novedoso. Pero sí es posible que el 2017 sea un momento de transición en el que las reglas del juego pasen de cambiar de unos pocos a unos muchos. Y exactamente ¿cómo ha cambiado esto para algunos pocos? Permítanme compartir la cotización bursátil y/o valoración del pasado verano de las nuevas empresas que están liderando en estas tendencias contra los antiguos líderes tradicionales por sector…

Los números no suelen mentir, salvo en casos aislados de burbujas. Esto no es una burbuja. Esto es una limpieza profunda de lo que ha llegado y de la que está por caer.