Las personas y organizaciones siempre han sentido la necesidad de hacer las cosas de manera más rápida, fácil y eficiente. Cazar, movernos, transportar cosas, comunicarnos, producir alimentos o bienes son tareas que han evolucionado impulsadas por dichas dinámicas.
Internet y su acceso a través de los múltiples dispositivos disponibles no sólo han acelerado de manera pasmosa la inmediatez de múltiples acciones sino que nos han acostumbrado en poco tiempo a una cultura que exige que todo sea veloz y sencillo. Miles de empresas se basan en estos valores y no en precios competitivos.
En un mundo donde el tiempo es un bien escaso, valoramos de manera extraordinaria todo lo que nos permite comprartiempo ahorrándonos tareas y desplazamientos; comprar alimentos o productos de todo tipo, hacer envíos, alquilar coches o ahorrarse colas en establecimientos son algunos ejemplos. Slack es una aplicación orientada a facilitar el trabajo, ahorrando por ejemplo en un 25% el número de reuniones necesarias en las empresas.
Pero todo va tan rápido que unos avances saltarán sobre otros. Analizando nuestros patrones de consumo, las marcas podrán saber nuestras necesidades futuras incluso antes que nosotros y serán posibles las ventas y entregas predictivas. Las cosas estarán ahí no sólo rápidamente, sino incluso simplemente cuando las necesitemos.
Las marcas deberán esforzarse en analizar y entender el consumer journey para tratar de encontrar mecanismos que permitan eliminar barreras y por tanto facilitar la compra. Y consecuentemente la estrategia de comunicación y medios deberá ser adaptada al momento, lugar, contexto y predisposición de los potenciales clientes.
Por su parte, los medios seguirán desarrollando contenidos para satisfacer la avidez de los usuarios por novedades, noticias, avances y contenido snackable para ser consumido on the go.
La navegación digital también se está viendo afectada. La regla de los tres clics pierde vigencia y nuevamente las marcas deberán esforzarse en mejorar su capacidad predictiva para reducir a los procesos de compra a un clic.
Pero como en cualquier otra época, los avances no son necesariamente del gusto de todos. No son pocos los que rechazan la obsesión por la inmediatez, la ansiedad por obtener un bien, un servicio o un contenido, lo cual lleva a acortar el tiempo en el que necesitemos y obtendremos otro y así sucesivamente. Y más cuando ello supone ceder a lascosas información masiva de nuestros gustos, hábitos, consumos o actitudes. Así que la contratendencia viene simplemente a confirmar la tendencia mayoritaria que parece imparable.
Alejandro Tinturé es‘global partner client leadership' de Mindshare