Mientras los pobres mortales nos hemos permitido unos días de relax (hacía años que esto no se paraba tanto, al menos
Madrid), los dioses del Olimpo de la comunicación prosiguen su guerra de posiciones. Las deidades implicadas son de diferentes familias, operadoras, redes sociales, conglomerados mediáticos, fabricantes de electrónica…
Los rayos saltan en varios frentes: la legislación (todos contra el monopolio de facto de Google y el poder de Apple), la fiscalidad (el escandaloso escaqueo de las tecnológicas a la hora de pagar), la neutralidad de la red (las tecnológicas contra la posibilidad de que las operadoras primen sus servicios en el reparto de la banda ancha) los medios de pago (con bancos y tarjetas por medio)...Y todas tratan de meterse en el terreno de las demás (pocos saben que Amazon se está haciendo el rey de la nube),
Y hago un punto aparte para el contenido. Las operadoras siguen cada vez más voraces en este terreno (Villalonga en Telefónica fue un visionario adelantado en quince años pero errado en la táctica). Y en el contenido incluyo la publicidad. No sé cuánto durará esta guerra, pero cuando llegue la primera tregua podemos estar ante un mapa completamente diferente. Pensemos en un futuro donde haya cuatro o cinco empresas verticales que controlen las conexiones y la infraestructura, los contenidos (con tendencia al pago), la tecnología para difundirlos y medir los resultados (RTB). ¿Dónde quedarán los grupos publicitarios? No lo sé: los mortales solo podemos ver cómo los dioses se enfrentan en las alturas.
David Torrejón es director editorial de Publicaciones Profesionales