Opinión

Cultura de país y publicidad

Se suceden las actuaciones del Gobierno que causan cabreo a los ciudadanos. Cuando no es la Ley Sinde es la limitación de velocidad a 110 km/hora. Hace unos meses, portavoces del Ejecutivo alcanzaron el punto más alto de autocrítica al que, con gran esfuerzo, llegan los gobiernos de nuestra reciente historia: no hemos sabido comunicar. Que es como decir: a pesar de lo bien que lo hemos hecho, no os habéis enterado.

Quedémonos por piedad en ese nivel de crítica o autocrítica. Si son tan conscientes de su inutilidad comunicativa, ¿por qué el Gobierno ha desechado la publicidad/comunicación –en su sentido amplio-- para intentar cambiar algunas cosas sin requerir del BOE? Ya pasó el tiempo de hacer campañas del tipo "Yo sí como patatas" o "Aunque tú puedas pagarlo, España no puede", eslogan que se utilizó en 1976 en coincidencia con la bajada del límite de velocidad a 100 km/h motivada por otra crisis del petróleo. Pero, sin duda, una buena estrategia de comunicación en todos los medios que hoy hay a disposición de los mensajes oficiales ayudaría mucho a conseguir esos cambios de hábitos que hoy se quieren imponer. Y probablemente con el mismo éxito que un decreto, pero generando mucha menos irritación.

Otro ejemplo sobre el que parece imperativo actuar, y actuar ya, con una buena campaña es el del empleo juvenil. Es una opinión personal, pero creo que buena parte del problema no está en los gobiernos sucesivos sino en la nula cultura corporativa que tienen las empresas españolas, de cualquier tamaño, a la hora de entender que los jóvenes son el futuro del país en el que operan. Es decir, su propio futuro. No hace falta irse muy lejos para ver cómo en otros países la contratación de jóvenes en régimen de prácticas o primer empleo no necesita depender de una subvención estatal, sino que hay una tradición por la cual las empresas actúan así. En España, por el contrario se piensa que contratar a un joven (y más si es mujer) tiene que estar justificado por alguna modalidad de contrato basura en régimen de usar y tirar.

Todos sabemos que cambiar esas actitudes no es cosa de dos días, pero también sabemos que son objetivos dentro del alcance de la publicidad. Y no siempre es una cuestión de presupuesto. Por poner un ejemplo: 250.000 euros en pegatinas (aunque nadie se haya creído que en esa cifra esté incluido el importe del cambio de señales) dan para hacer una bonita campaña de concienciación de ahorro en internet, redes sociales, y hasta medios convencionales a través de relaciones públicas.

David Torrejón

Director editorial

 

Tu privacidad es importante para nosotros

Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar nuestros servicios con fines analíticos, para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación y para incorporar funcionalidades de redes sociales. Podrás cambiar de opinión y modificar tus opciones de consentimiento en cualquier momento al volver a esta web y accediendo a la página Política de Cookies.

Panel de gestión de cookies

✓ Permitir todas las cookies
✗ Denegar todas las cookies
Estas cookies son necesarias para que el sitio web funcione y no se pueden desactivar en nuestros sistemas. Usualmente están configuradas para responder a acciones hechas por usted para recibir servicios, tales como ajustar sus preferencias de privacidad, iniciar sesión en el sitio, o llenar formularios. Usted puede configurar su navegador para bloquear o alertar la presencia de estas cookies, pero algunas partes del sitio web no funcionarán. Estas cookies no guardan ninguna información personal identificable.

Cookies técnicas

✓ Permitir
✗ Denegar
Las cookies estadísticas nos permiten contar las visitas y fuentes de circulación para poder medir y mejorar el desempeño de nuestro sitio. Nos ayudan a saber qué páginas son las más o menos populares, y ver cuántas personas visitan el sitio.

Google Analytics

Ver sitio oficial
✓ Permitir
✗ Denegar
Estas cookies pueden ser añadidas a nuestro sitio por nuestros socios de publicidad/medios sociales. No almacenan directamente información personal, sino que se basan en la identificación única de tu navegador y dispositivo de Internet para ofrecerle compartir contenido en los medios sociales o para mostrarte contenido o anuncios relevantes en nuestro sitio web u otras plataformas.
✓ Permitir
✗ Denegar
✓ Permitir
✗ Denegar