Page 64 - MUJERES A SEGUIR Nº 3
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>> M. ¿La cuestión formal, el estilo, te va preocupando más o menos a cuando leí esta novela me dije: esta soy yo. Flaubert decía ‘Madame Bovary
medida que haces más películas? c’est moi’. Pues bien, Florence Green soy yo. No he vivido en Inglaterra, ni
I.C. Es curioso, pero nunca me preocupó. En mis películas puedes en los cincuenta, ni soy viuda, pero hay algo que nos une. He cambiado cosas
reconocer cosas familiares, pero que no tienen que ver con el estilo, sino con de la novela, porque me parecía que eran difícilmente comprensibles para el
el espíritu. Creo que la historia da el estilo. También es verdad que trabajo espectador y que le podían desviar del tema principal, que para mí es algo
con un aliado formidable, Jean-Claude Larrieu, mi director de fotografía, difícil de explicar con palabras, pero que me atraviesa y que vengo observando
con el que colaboro desde los años de la publicidad. Hace 29 años que desde pequeña: la lucha de la bondad genuina, que no del buenismo, cuidado,
trabajamos juntos y nos entendemos muy bien. con todos los hijos de puta y la maldad que hay en el mundo. Es algo que
se manifiesta en todas partes: en el patio del colegio, en el trabajo, en las
M. ¿Cómo te enganchó la historia de La librería? relaciones de amistad… Emily Mortimer ha creado, además, un personaje
I.C. Hace unos años descubrí, como muchísima gente, a Penelope Fitzgerald. maravilloso. Es una actriz a la que quiero, de esas personas a las que no hay
Fue una mujer con una vida durísima que comenzó a publicar a los 60 años. que explicarles demasiado las cosas. Ella entendió desde el principio quién
No escribió mucho, pero cuando se puso, cogió carrerilla. Para mí La librería era Florence Green y quién era yo, y tuvimos una conexión alucinante. La
es su gran obra. Sucede en 1959 en un pueblo de Inglaterra. La protagonista película es un canto de amor a la lectura, a los libros y a ser bueno aunque
se llama Florence Green y es una viuda de mediana edad que quiere abrir una te estén dando hostias. Sin llegar a convertirte en ingenuo, porque llega un
librería. Muchas veces me han preguntado si las protagonistas de mis películas momento en el que tienes que darte la vuelta. Siempre he luchado mucho con
tienen que ver conmigo. Siempre respondo que tienen que ver con gente que la parábola de poner la otra mejilla. Es verdad que a veces la he puesto, no del
he conocido o con cosas que he vivido, he fotografiado o he documentado, todo convencida de que tenía que hacerlo. Pero ahora creo que cuando te dan
pero no puedo decir que tengan que ver directamente conmigo. Sin embargo, una hostia, hay que dar dos.
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