Page 34 - MAS_16
P. 34

Premio MAS


                       DESAFIO DIGITAL




         Alai Miranda Blanco



         Ingeniera y divulgadora








                 «Me gustaría que mi



                          trabajo tuviese un




            impacto en la vida de



                                            las personas»



        Es poco más que una

        adolescente, pero tiene
        talento, una visión y una
        seguridad en sí misma
        que no se corresponden              Ahora tiene 18 años y estudia Ingeniería de Computadores, pero Alai
        con su edad. Pese a esa             Miranda Blanco contaba solo 11 cuando asistió a sus primeros dos
        juventud, ya ha puesto              talleres de tecnología: uno de Arduino y otro de textil y joyería. “Allí
                                            descubrí que la tecnología era más que aquello a lo que se dedica mi
        en marcha destacados                padre, que es una herramienta que puedes aplicar a cualquier proyecto
        proyectos tecnológicos              para mejorarlo o a cualquier problema para solucionarlo. Desde entonces
        y lleva a cabo una                  he asistido a talleres de todo tipo relacionados con el mundo STEAM”.

        encomiable labor de                 Poco después creó también su primer proyecto formal, Alibubu, un
        divulgadora, inspirando             oso de peluche que incorpora un dispositivo NFC para guardar los
                                            datos personales de los niños refugiados que viajen sin identificación.
        a otros jóvenes a seguir            Lo presentó en una charla TEDx cuando tenía 12 años. “Estábamos
        sus pasos.                          en 2016 y en aquel entonces en las noticias se hablaba mucho de los
                                            refugiados. Las cifras de niños que viajaban solos eran aterradoras. Un
                                            día pensé en que si yo estuviera en esa situación, me gustaría estar
                                            acompañada, aunque fuera de un objeto inanimado. De esta manera
                                            nació Alibubu”.

                                            En respuesta a otra necesidad, esta vez durante el confinamiento, surgió
                                            Docuscopio. “El tener que recibir e impartir clases online fue algo que
                                            pilló por sorpresa a todos y nadie estaba realmente preparado, así los
                                            profesores de química, dibujo técnico o matemáticas se peleaban día
                                            a día con las pizarras virtuales cuando intentaba resolver ejercicios”.
                                            A partir de unos diseños que encontró en la plataforma Thingiverse,
                                            creó un artilugio impreso en 3D que permite proyectar en la cámara del


      34
   29   30   31   32   33   34   35   36   37   38   39