
La violencia azota Caracas sin compasión. Uno de los distritos que cada día lo sufre es el de El Hatillo, una zona de la capital venezolana que como en otras hay menos policía de la que haría falta. Para combatir esta carencia, J. Walter Thompson ha recurrido a la creatividad y ha presentado ‘La Policía Invisible’.
El Hatillo es un pequeño distrito de Caracas, ciudad en la que, de media, hay once homicidios cada día. Aunque la escasez policial es algo recurrente en toda la ciudad, este distrito tiene una situación más grave. Debería contar con 400 policías, pero tiene menos, unos 157. Además, el distrito tiene un gran cementerio de patrullas fuera de servicio y no cuenta con presupuesto para repararlas.
La campaña (accede aquí al caso), en forma de experimento social, busca comprobar el rol esencial de la policía. Para ello, un conjunto de patrullas fueron restauradas, sus luces fueron reactivadas y se desplegaron en las zonas más peligrosas de la zona, pero sin policías dentro y solo dotadas con cámaras de seguridad.
Como resultado de este experimento, pudo comprobarse que la sensación de seguridad que proporcionaron las patrullas consiguió que los ciudadanos volvieran las calles (cuando no había patrullas estaban desiertas) y disfrutaran de los espacios públicos con tranquilidad. El resultado, según ha explicado la agencia, es que se ha conseguido “llamar la atención de los venezolanos en medio de una aguda crisis social, económica y política, y dio luz sobre un problema del que nadie estaba hablando: todas las alcaldías necesitan más apoyo del Gobierno Nacional para tener más policías reales”.
Durante la primera semana de publicación de esta campaña, registró más de un millón de vistas y se colocó como uno de los temas más comentados en redes sociales. Asimismo, y gracias a la creatividad, El Hatillo también ha conseguido un 30% de incremento en reclutamiento policial.