En busca de hacer frente a un término al que las mujeres de Polonia se enfrentan constantemente, ‘no’, la marca de joyería Yes ha lanzado una poderosa campaña que reivindica que escuchen ‘sí’ más a menudo.
Creada por la agencia 180Heartbeats + Jung V Matt, la creatividad traslada su idea a una película de marcado carácter que solo la cadena televisión pública del país, TVP, controlada por el partido de derechas Prawo i Sprawiedliwosc (PiS), se ha negado a emitir por ser “dañina para los espectadores y su sensibilidad”. Y es que la cadena no ha permitido la aparición en pantalla de parejas no heterosexuales ni desnudos (en este caso, a través de la lactancia materna y y una mujer que se ha sometido a una mastectomía).
La pieza, en cuyas secuencias aparecen mujeres como Aleksandra Zebrowska (madre y empresaria), Katarzyna Zillmann (deportista), Aleksandra Wiederek-Baranska (activista en la lucha contra el cancer de mama), Christina Flagmeier (quien se convirtió en modelo a la edad de 74) o Bogna Golec (modelo de tallas grandes), se presenta como un tributo “a todas las mujeres, a su diversidad, coraje, independencia, fortaleza, emociones y sensibilidad”.
La campaña supone asimismo una reivindicación de la mujer real en publicidad, y es que, según los datos que ofrece la marca en una nota de prensa, un 59% de las mujeres opina que su figura se refleja de una manera anticuada, un 76% cree que las campañas recurren muy frecuentemente a mujeres muy delgadas, y el 68% que no existe una representación suficiente de mujeres mayores. Otro 68% considera que no se siente representada en los anuncios y el 81%, que les gustaría que la publicidad mostrase a todo tipo de mujeres.
Producción y medios
El spot de la campaña, cuya gestión en medios corresponde a MullenLowe MediaHub, ha sido producido por F25 y dirigido por Krzysztof Grajper, con postproducción de Xantus. También ha formado parte de este proyecto una sesión de fotos liderada por la fotógrafa Gosia Turczynska.
Además de en Polonia, I am a woman se está difundiendo en República Checa. Y no solo contempla televisión, también internet, redes sociales y plataformas VOD.