Page 59 - MUJERES A SEGUIR 6
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Hacer que las                       para reclusas en tercer grado.  Allí se percató de algo que despertó su
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                                 personas que, por                   no la apagaban; abrían el agua para ducharse y no la cerraban; encendían el
                                 un accidente o una                  fuego y no lo cortaban. No acababan las secuencias. Las presas me contaron

                                 enfermedad, han                     que era porque en la cárcel todo está automatizado: te abren y cierran las
                                                                     puertas, te encienden y apagan las luces y el agua. Y el cerebro olvida cómo
                                 perdido el movimiento               hacerlo. Me quedé fascinada. Me enamoré del cerebro y de cómo aprende y
                                 vuelvan a erguirse, a               desaprende”, cuenta. “Dejé la carrera y empecé Terapia Ocupacional, que es
                                                                     un híbrido entre psicología y fisioterapia, porque me interesaba mucho cómo
                                 comer solos, a hablar               la acción y la actividad influyen en el cerebro”. Además, se doctoró cum
                                 o incluso caminar, se               laude en Neurocontrol Motor e hizo un máster en Patología Neurológica.
                                 convirtió hace años en              Hace cuatro años, con su centro ya en marcha, empezó a investigar una nueva
                                 el objetivo de Charo                línea de trabajo con una idea en mente: recuperar las conexiones neuronales.

                                 Ortín. Investigando                 Al quedar lesionados, los pacientes siguen sabiendo cómo mover una mano
                                                                     o un pie, pero sus conexiones neuronales son débiles y no consiguen hacerlo.
                                 por su cuenta ha                    La orden que el cerebro cree enviar, la de mover una mano o un pie, no
                                 desarrollado un                     tiene resultado y la persona se siente frustrada. Peor aún, los mecanismos
                                                                     de plasticidad de las neuronas –su capacidad para aprender o desaprender
                                 innovador método                    algo- se activan de forma negativa. El motivo es que el cerebro está diseñado
                                 que utiliza la realidad             para ahorrar energía. El esfuerzo titánico que supone para ese órgano dañado
                                 virtual para engañar al             intentar mover un miembro se convierte en un desencadenante fatal que
                                                                     puede acabar por borrar ese miembro, olvidándolo para centrarse en otros
                                 cerebro y conseguirlo.              sanos. “Nuestros pacientes sufren unos fenómenos de atrofia y otros mucho
                                                                     más complejos a nivel de control motor por causa de ese inmovilismo
                                                                     prolongado. Si la recuperación precisa de una repetición intensiva y ellos no
                                                                     pueden moverse, ¿cómo conseguir que sí lo hagan?”

                                                                     En su investigación, Ortín comprendió que la clave podía estar en las
                                                                     neuronas espejo, que son las responsables fisiológicas de la imitación. Son
                                                                     las que hacen, por ejemplo, que bostecemos o nos rasquemos cuando la
                                                                     persona de enfrente lo hace. “Las neuronas espejo permiten que no seas tú
                                                                     el que mande la señal al miembro afecto, sino que al ver el movimiento en
                                                                     un tercero consigas hacer diana en tu propia musculatura”, explica.

                                                                     Para activarlas empezó a experimentar con técnicas de VR. Diseñó un
                                                                     entrenamiento de observación motora para conseguir engañar al cerebro. Con  >>





























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