
La iniciativa tiene la intención de dejar claro que ejercer la creatividad publicitaria no es cualquier cosa, dice uno de sus promotores, Carlos Miniño, sino que exige, además de conocimientos y maestría, una actitud cuando menos voluntariosa. Si a ello se le añaden unas dosis de sano sentido del humor, unas ganas de verse, 36 grados en el exterior, unos callos, unos garbanzos y una pizca (generosa) de picante, tenemos una de las tradiciones más originales del sector. Y una poesía.
El pasado 16 de julio, catorce publicitarios ‘capitaneados’ por dos creativas: Pepa Rojo y Montse Pastor, secundadas por Jorge Candeal, Siro Garcia-Quijada, Cesar García, Manolo Valmorisco, Fernando Martín, Rafa Hernandez, Sunde J. Sastre, Eduardo Lozano, José Luis Moro, Juan Carlos Martinez, Javier Álvarez y Carlos Miniño, lo volvieron a hacer. Ninguno ha sufrido daños irreparables, aseguran, y prometen repetir.
Desde hace doce años, el restaurante Casa Adriano recibe cada mes de julio, cuando más aprieta el calor del verano madrileño, a un grupo de colegas que decidieron reunirse alrededor de un menú poco convencional para esta época del año (y, por qué no decirlo, un plato controvertido en cualquier momento). A saber: callos con garbanzos picantes, por supuesto (bastante picantes, apostillan los comensales). La razón no está muy clara y quizá lo mejor sea no buscarla y quedarse, simplemente, con el hecho de que, caiga quien caiga, cada año, este grupo de creativos y creativas publicitarios (que varía en número) siguen desafiando al termómetro y reuniéndose alrededor de un manjar que haría entrar en calor hasta a un muerto.
Eso sí, este poco convencional menú de verano es por encargo y exclusivo (lógicamente), para disgusto de otros comensales.
Y por aquello de llevar la creatividad hasta la cocina, Manuel Valmorisco ha añadido a la cita de este año una poesía. Porque no todo va a ser alimento para el cuerpo:
“Brindo aquí por el calor,
que empiece a mostrar su fuerza.
Y que se instale y ejerza
ya en Julio su gran rigor.
Haga al asfalto vapor
y que provoque desmayos.
Que no haya brisa ni orbayo
Siga el mercurio trepando,
que Miñino tome el mando
y nos convoque ¡a los callos!"