El valor más escaso en 2030 será la confianza, se afirma en este documento, debido a la confluencia de factores como la desinformación, la polarización o la influencia de la tecnología. Y, por tanto, será también un activo estratégico imprescindible para las organizaciones, se indica en el informe PR2030: el futuro de la comunicación, llevado a cabo por SEC Newgate y presentado ayer en Madrid.
El informe es el resultado de un año de investigación, en el que han participado cerca de quinientos profesionales de la compañía en todo el mundo. Sus conclusiones ponen de relieve cómo los departamentos de comunicación y asuntos corporativos deben transformarse para fortalecer la legitimidad institucional y el posicionamiento estratégico de las organizaciones, en un entorno cada vez más complejo, señalan. El objetivo de este estudio es no solo analizar la situación sino ofrecer las principales claves para afrontar los retos detectados.

Así, el informe describe un entorno en el que “las organizaciones operan en un contexto de alto riesgo y baja confianza, marcado por la volatilidad geopolítica, el cambio climático, la fragmentación social y la desinformación”, en el que la demanda de asesoría estratégica, comunicación de crisis, escenarios de riesgo, defensa de intereses y mensajes ESG auténticos va en aumento, así como también la preocupación ante la disminución del valor de las relaciones con medios tradicionales y la comunicación masiva genérica.
Estas son, de acuerdo con el informe, las claves para abordar los cambios:
- Adoptar la transformación digital con visión ética.
- Invertir en talento multigeneracional y en nuevas competencias.
- Reforzar transparencia, autenticidad y diálogo bidireccional.
- Potenciar la comunicación de crisis y la resiliencia estratégica.
Inteligencia Artificial
El estudio profundiza también en el impacto de la inteligencia artificial en el sector, que “ofrece eficiencia y análisis, pero también riesgos éticos: desinformación, deepfakes, y pérdida del ‘toque humano’”, señala. Si bien, se tiene claro que el modelo futuro será un híbrido humano-IA, en el que “las máquinas apoyan y los humanos guían, con énfasis en la creatividad, la empatía y la supervisión ética”.
También aborda el problema de la desinformación como una amenaza crítica: “La proliferación de información errónea y desinformación erosiona la confianza pública”, y, ante esto, es necesario: “Transparencia, educación y alfabetización mediática, colaboración con verificadores de datos y organismos reguladores y herramientas avanzadas de monitoreo, fact-checking en tiempo real y pre-bunking. Los comunicadores deben ser guardianes activos de la verdad”.
"El modelo futuro será un híbrido humano-IA, en el que “las máquinas apoyan y los humanos guían, con énfasis en la creatividad, la empatía y la supervisión ética"
Todo ello, además, requiere de in perfil de profesionales que combine ética y pensamiento crítico, ciencia del comportamiento y análisis de datos, adiestramiento en IA y forense digital y tenga habilidades sociales como empatía, gestión de relaciones, y credibilidad.
Este estudio se presentó en el transcurso de un encuentro organizado por la compañía y que contó con la participación de Ángel Alloza, CEO de Corporate Excellence; Maurizio Maione, director del proyecto en SEC Newgate a nivel internacional, y Ludi García, directora general de SEC Newgate Spain.