Luis García-Purriños (arte) y Samuel González (copy), dupla creativa en Ernest, protagonizan la nueva entrega de El Relevo, la sección que dedicamos a descubrir las opiniones y las vivencias de los nuevos profesionales. Además de en la web Anuncios, puedes encontrar este contenido en el Nº 1739 de la revista.

Anuncios.— ¿La publicidad ha sido lo vuestro desde el principio? ¿Qué formación tenéis?

Luis García-Purriños.— Siempre me ha gustado el diseño, el humor y la política. Cuando tocaba elegir carrera pensé que tendría un poco de todo, y por suerte, así es. Estudié Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad Complutense de Madrid y luego hice un máster de creatividad en la Miami Ad School de Madrid.

Samuel González.— Cursé la carrera de Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad de Alicante. Imagino que, como muchos, empecé un poco sin saber exactamente qué era esto de la publicidad y la escogí motivado por hacer cosas que se vieran en la TV. Pronto me di cuenta de que lo que quería era ser creativo, y eso me llevó a hacer el máster de creatividad en The Atomic Garden.

A.— ¿Desde cuándo estáis en la compañía y qué labores habéis desempeñado en ella hasta ahora?

L.G-P.— Desde hace poco más de un año. Ambos estamos en el departamento creativo de Ernest como dupla junior.

S.G.— En Ernest llevo casi 3 años. Empecé como trainee y, bueno, algo parece que hice bien porque aquí sigo. El rol que ocupo es el de copy creativo, pero mi principal trabajo es pensar ideas para cualquier tipo de formato. Siempre intentamos que sean cosas que molen.

Samuel González: Entrar a una agencia y que tenga piscina es algo que se te queda marcado

A.— ¿Qué recuerdo se os ha quedado grabado a fuego de vuestro primer día de trabajo?

L.G-P.— Mi primer día de trabajo en la industria fue en una agencia coreana, en Alemania y con compañeros de 30 países diferentes, principalmente brasileños. Recuerdo escribir a mi hermano con alguna broma sobre la Torre de Babel.

S.-G.— He de decir que entrar a una agencia y que tenga piscina siempre es algo que se te queda marcado. Pero quizás lo que más me sorprendió fue ese primer brief que me dieron. Pensé: “Vaya, que esto ya no es la escuela, esto es curro real”.

A.— ¿Os costó cambiar el rol de prácticas a trabajador?

L. G-P.— El cambio de Alemania a España es grande en muchos sentidos, a nivel agencia, por suerte, en ambas me he encontrado con un lugar en el que prima la creatividad y con un gran ambiente. Así que el cambio no fue nada brusco.

S.G.— No, para nada. Todo fue muy natural, y aunque tus exigencias suben un poco, también lo hacen tus cualidades como creativo. Al final, esta profesión se va aprendiendo como todas. Así que solo lo noté en mi paz mental, que aumentó mucho con ese primer contrato.

A.— ¿Qué es lo que más os gusta y lo que menos de vuestro día a día?

L. G-P.— Lo que más es que no hay dos semanas iguales, tocamos muchos mundos a la hora tanto de pensar como de diseñar. Lo que menos, las reuniones que podrían haber sido un correo.

S.G.— Lo que más me gusta es todo lo que se aprende en esta profesión. Puedes estar un día pensando para una gran marca de cerveza y, al día siguiente, sobre un sector del que jamás has oído hablar. Eso te hace saber un poco de muchas cosas… y, oye, luego eso te salva una cita. Y lo que menos, pues las decenas de cambios que hay, esas ideas que parece que van a salir y después terminan en un cajón…

Luis García-Purriños: No hay dos semanas iguales, tocamos muchos mundos a la hora tanto de pensar como de diseñar

A.— ¿Una campaña, de cualquier época y lugar, en la que os hubiera gustado participar?

L. G-P.— Me hubiese gustado participar en una campaña de presupuesto millonario, idea increíble y gran exposición, como It´s a Tide Ad, de la Super Bowl 2018. Aunque, por otra parte, también me encantaría hacer una como Pricepacks, que mezcla diseño, compromiso y una idea impecable.

S.G.— Siempre me gustaría trabajar en alguna superproducción americana. Y, más concretamente, en una de esas de Uber con algún famoso extravagante. Molaría con Carlos Baute, que mi madre es fan.

A.— ¿Una persona que, a nivel profesional, os inspire?

L. G-P.— He tenido la suerte de toparme con superiores que han confiado en mí y han sabido inspirarme y enseñarme mucho. Destaco a Ricardo Wolff y Ailton Henriques, de mi anterior agencia y a Tania Riera y Nacho Guilló, en la actualidad.

S.G.— Decir solo una sería injusto. Uno de los primeros que me inspiró y que me metió el gusanillo de este mundo fue Rafa Fortis, director de TAG. Y luego también Nacho Guilló y Tania Riera. De esas personas que claramente te inspiran, que empujan absolutamente todas las ideas y hacen que pasen. Y encima tenemos la suerte de trabajar muy cerca de ambos.

A.— ¿Sin qué red social o aplicación no podéis vivir?

L. G-P.— Uno de mis hobbies es crear contenido para Instagram, así que esta es la que diría. Aunque cada vez intento pasar menos tiempo scrolleando, la verdad.

S.G.— Me gustaría decir que puedo vivir sin TikTok, pero la verdad es que no. Y otra a la que le doy mucha caña es Instagram. Uno de mis propósitos es dedicarles menos tiempo a ambas.