BBVA ha llevado a cabo una reorganización de su área de comunicación con el objetivo de potenciar su marca y dar una mayor visibilidad a los valores diferenciales del grupo, para anticiparse a las nuevas exigencias de un mercado financiero global. Dirigida por Gregorio Panadero, que se incorporó a BBVA el pasado abril en sustitución de Javier Ayuso, el área pasa a denominarse comunicación y marca y se organiza en seis unidades: comunicación corporativa global, dirigida por Alberte González Patiño, que se reincorpora a BBVA procedente de la dirección de comunicación de Ono, para gestionar la comunicación externa e interna del grupo, así como la de las áreas de negocio; publicidad corporativa y contenidos, a cargo de Ignacio Maldonado, que se ocupará de desarrollar la publicidad institucional y dirigir los patrocinios, que se transformarán en contenidos globales y territorios de marca (fútbol y música, entre otros); comunicación digital, dirigida por Jesús Frej, que se ocupará, entre otras funciones, de buscar la máxima difusión del grupo a través de los nuevos canales online, con un foco especial en las redes sociales y multimedia; estrategia y evaluación, bajo la dirección de Ángel Alloza, que facilitará la definición y la implantación de las directrices del área, gestionará la identidad, la marca y la reputación de BBVA, así como los sistemas de medición y evaluación; responsabilidad corporativa, al frente de la cual está Toni Ballabriga, que gestionará las políticas de acción social y sostenibilidad de la compañía y desarrollará una nueva función cuyo objetivo consistirá en reforzar la comunicación directa con los principales grupos de interés, y comunicación institucional, dirigida por Sonia González, que agrupa las funciones relacionadas con actividades culturales y eventos.
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