Parece que, casi inevitablemente, se avecinan nuevos tiempos para el mercado televisivo. La edición de este año del seminario dedicado al medio que organiza AEDEMO --y que, por otra parte, es sin duda una de las más importantes citas del sector publicitario español-- ha dado suficientes indicios de que, si bien el mercado sigue funcionando cotidianamente con parámetros muy similares a los de los últimos años, el escenario se está alterando. Como símbolo de esa alteración hay que aludir al cuestionamiento a que en AEDEMO ha sido sometido el GRP, unidad de medida de la eficacia televisiva que ha dominado el mercado desde hace más de una década. Una televisión más fraccionada y en la que formas no convencionales de publicidad están adquiriendo creciente protagonismo parece, a decir que los expertos, que le están restando valor y representatividad a un índice que ha determinado durante largo tiempo, y todavía lo hace, las asignaciones presupuestarias televisivas.