La semana pasada fue la del vídeo de Grant Thornton, una empresa de auditoría fiscal y asesoramiento financiero con sede en el Reino Unido y oficinas en España y muchos países más. El martes ya se llevaban 550.000 visionados en YouTube de "La crisis española desde un punto de vista diferente". Ese punto de vista es, naturalmente, esperanzador y positivo. También el propio vídeo se puede ver de diferentes maneras.
Una positiva, y es que alguien proyecta hacia fuera (el vídeo está en inglés subtitulado en español) parte de lo bueno que tenemos, principalmente grandes empresas multinacionales y una forma de vivir que todos envidian. Como tal, probablemente esta pieza en origen destinada al BtoB ha conseguido más que todas las reuniones habidas hasta ahora para la llamada Marca España.
La negativa es que, ni aun así somos los españoles capaces de ver el lado positivo. Cuando uno lee los comentarios del personal acerca del vídeo se da cuenta de que son en un 90% destructivos, no principalmente hacia Grant Thornton, sino hacia la situación del país, la clase política, las grandes corporaciones, etcétera.
Es cierto que lo que oculta el vídeo es algo que saben todos los economistas, que el crecimiento y el bienestar de los países dependen en mucha mayor medida de sus pymes que de las grandes empresas multinacionales o paraestatales. Y en España las pymes han sido las principales perjudicadas por la crisis, sin que se haya hecho nada realmente e caz para salvarlas. Pero no quiero entrar en ello, sino sacar algunas conclusiones en relación con lo nuestro.
La primera, lo difícil que se está poniendo comunicar, incluso cuando se quiere ser positivo. Hay un clima de pesimismo, cinismo y descreimiento que realmente asusta. La segunda, que una aburrida consultora fiscal y financiera ha dado una lección de comunicación. Con una pieza que ha conseguido la tan deseada viralidad, se ha puesto de golpe en el mapa de España. Espero que en su labor de asesoría a otras compañías no subestimen el valor que puede tener la comunicación. Por último, también podríamos señalar cómo el formato del stop motion del dibujante, por llamarlo de alguna manera, sigue funcionando y se está convirtiendo en un género en sí mismo, especialmente para un tipo de discurso largo al que las marcas de consumo no le han sacado partido.
David Torrejón es director editorial de Publicaciones Profesionales