
El término innovación es más que una palabra de moda. El fundador y editor jefe de edición británica de la revista Wired, David Rowan, habló de necesidad al referirse a la innovación. Una necesidad que a veces trata de afrontarse por vías que quizás no sean las adecuadas, pero que permiten en cualquier caso hacer avanzar el mundo.
El ecosistema de start ups está repleto de compañías que logran grandes cifras de inversión para materializar sus proyectos y que suelen tener en común el uso de la tecnología. Pero, sea cual sea la naturaleza y tamaño de una empresa, "las compañías tienen que tomarse en serio la innovación, pues existe una curva exponencial que nos indica que las cosas nunca van a avanzar de un modo tan lento lo han hecho hasta ahora". Buena cuenta de ello han dado muchos de sus líderes, explicó Rowan, incluso los de organizaciones con más de un siglo de historia, que han apostado por evolucionar hacia un modelo que les permita adaptarse ágilmente a las necesidades del mercado.
La intervención del fundador de Wired en Reino Unido versó sobre diferentes vías sobre las que cimentar la evolución empresarial, apoyándose en todos los casos en ejemplos reales de todo el mundo que ha plasmado en un libro titulado Non Bullshit Innovation: Radical Ideas from the World's Smartest Minds. Entre ellas, el empoderamiento de los equipos de trabajo, como es el caso del CEO de la compañía desarrolladora del videojuego 'Clash of clans', cuyo concepto de negocio pasa por apostar por el talento y que sean sus propios empleados los que decidan cómo trabajar. "Hay que tratar de empoderar a todo el mundo para que la innovación pueda salir adelante", explicó Rowan.
Entre estos caminos hacia la innovación también destaca el valor de la creatividad. En el pudiente barrio londinense de Mayfair, y concretamente en su plaza más cara, hay una librería que preciesamente utilizó el recurso de la creatividad para poder competir con Amazon. Lo hizo gracias a una idea: la creación de librerías personalizadas para sus clientes en base a sus gustos o a temáticas en concreto.
Pero la creatividad no es la única vía, también hay otras como la construcción de un ecosistema. Este es el caso del fabricante chino de smartphones Xiaomi, cuyo nicho de mercado consiste en la venta de dispositivos de calidad a bajo precio. De su entorno forman parte una gran cantidad de start ups que fabrican accesorios para la marca y que cuentan, precisamente por ello, con un público potencial de millones de clientes en todo el mundo.
Otros de estos senderos hacia la innovación pasan por la adaptación hacia las necesidades insatisfechas, la construcción de diversidad cognitiva, la agilidad de actuación o la búsqueda de rutas que nadie haya explorado. En cualquier caso, el directivo recordó que “los seres humanos no somos algoritmos” e hizo hincapié en que “la tecnología va a estar siempre hay, pero tenemos que ser creativos para darle un uso”.