Facial Coding, como se denomina esta herramienta, establece cinco emociones básicas, cada una de ellas definidas por unos rasgos faciales claros y comunes, que permiten evaluar las reacciones de los individuos ante el visionado de, en este caso, un spot, pues de momento la herramienta se aplica solo para campañas televisivas (aunque no se descarta ampliarlo a otros medios). Atención, concentración, sorpresa, me gusta o no me gusta, son esos cinco campos sobre los que se trabaja. El individuo, que previamente ha consentido participar, sólo tiene que situarse delante de la web cam, y a partir de ahí, observar la publicidad que aparece en su ordenador. La tecnología conseguirá captar sus reacciones gesticulares y, posteriormente, evaluar realmente los efectos que esa creatividad ha tenido en el consumidor.
es el medio líder en notoriedad y credibilidad en el sector de la Publicidad y el Marketing y el más leído.
Contenido exclusivo para suscriptores de pago.
Si ya tienes una cuenta Inicia sesión
Si no tienes una cuenta Suscríbete