Entre los moderados y los que no tienen ideología suman el 55% de la población española. Sin embargo, parece que los partidos políticos siguen empeñados en hablar solo para sus votantes. Y, cada vez más, en un tono que alcanza en nuestro país niveles de griterío y bronca. En ese contexto, oír a dos políticos de signo distinto hablar de honestidad, seducción, emoción, convicción… suena a altura política. Y no es un desiderátum, ocurrió hace unos días en la jornada organizada por APG bajo el lema ‘El votante medio contraataca’.
Con el objetivo de debatir sobre cómo se conquista al votante medio, a la gente corriente que corre el riesgo de desentenderse de la política cuando estamos a punto de encarar las cuartas elecciones generales desde 2015, desde la APG se planteó organizar una jornada con tres destacados invitados: de un lado, Rodrigo Terrasa, de larga trayectoria en información política, que haría las veces de entrevistador/moderador, y de otro, Borja Sémper (PP) e Ignacio Urquizu (PSOE). Resumimos aquí algunas de las ideas que surgieron en la conversación, cuya crónica se publica en Anuncios Revista.
Rodrigo Terrasa (El Mundo): “Esta campaña (electoral) va a ser pura publicidad”, pues a estas alturas y salvo sorpresas de última hora, “todo el mundo conoce lo que proponen los partidos”. Aunque entra dentro de lo probable que los últimos acontecimientos tras hacerse pública la sentencia del Tribunal Supremo sobre el procés tenga una incidencia sobre la intención de voto.
Ignacio Urquizu: “la gente corriente es más ideológica que los demás y tienen más claros los valores, consumen menos periódicos y ven más la tele, cuando tienen una duda la resuelven desde su ideología. Por eso la credibilidad es muy importante. Las campañas más ideológicas llegan a la gente corriente". La política, dijo, “tiene que intentar explicar el mundo, aunque lo que ocurre en realidad es que estamos en los parámetros de una sociedad postmoderna en la que se trabaja en la táctica, no en la construcción de marca”
Borja Sémper: “Sí hay un campo para la seducción desde la forma (hoy es fundamental) y el fondo (el proyecto)”, pero también alertó: “Si metemos todo el discurso político en un tuit, empobrecemos el mensaje” y se lamentó de que “en España, a menudo los partidos han cometido el error de hablar solo a sus votantes”, mientras, cree que “sería muy edificante que los candidatos no hablasen de sus adversarios en toda la campaña”.