La mítica carretera 101 atraviesa los estados de California, Oregón y Washington, en la costa oeste de los Estados Unidos. Conecta Silicon Valley y el aeropuerto con la ciudad de San Francisco. En los últimos años se ha vuelto una especie de tradición que las compañías tecnológicas pongan vallas publicitarias en esta ubicación como una forma de demostrar que están presentes en ese mercado. “Es como poner un pie en el terreno”, nos revela Carlos Cantú, director de marketing de Freepik Company, en una entrevista concedida a Anuncios. Este fue el punto de partida de la acción de street marketing que Freepik, compañía de origen malagueño, puso en marcha en San Francisco con motivo de la apertura de su nueva sede.
Una valla con muy buenas vistas de esta autopista, pero que estaba sobre un edificio de dos pisos que se encuentra en muy mal estado. “Decidimos que si poníamos nuestra publicidad ahí era una buena oportunidad para demostrar nuestro claim o concepto tras el rebranding: mejor diseño, más rápido, así queremos posicionar a Freepik entre nuestra audiencia, y vimos una buena manera de ponerlo en práctica. Yo fui creativo y una planner con la que trabajé muchos años cuando era redactor decía: 'no me digas que tu marca hace algo, enséñamelo'. Pues esto es un buen ejemplo.”, nos explica Cantú.
Así que manos a la obra: se transformó en tiempo récord un edificio en el barrio de SoMa en San Francisco, una zona underground del centro de la ciudad, donde se ubican numerosas start-ups y que es conocida por sus murales. Freepik ha pintado la fachada completa del edificio con murales en los que predomina el color corporativo de la empresa.
La gente que pasa diariamente por esta autopista y que habitualmente se encuentra con un edificio que pasa desapercibido entre tonos negros y blancos ha pasado a encontrarse con un edificio lleno de color que hace inevitable desviar la vista. Y cuando lo hacen se encuentran con la publicidad de Freepik, su nueva imagen y su claim Great design, faster.
La campaña estará activa durante ocho semanas (hasta el 1 de noviembre) y todo el diseño ha sido realizado íntegramente por el equipo de Freepik. Para lograrlo, la compañía ha colaborado con la productora mexicana Humano que se ha encargado de la ejecución del diseño, liderada por Osmani Contreras, quien asumió el desafío de pintar el edificio en tiempo récord junto al muralista Kraken.