Las campañas digitales sin protección antifraude están asumiendo un elevado riesgo. Y es que, según la vigésima edición del estudio Media Quality Report de Integral Ad Science (IAS), las tasas de fraude publicitario en entornos no optimizados se han disparado hasta niveles no vistos en los últimos cuatro años, con un alarmante 10,9% a finales de 2024. Esta cifra representa un índice 15 veces superior al registrado en campañas que aplican tecnologías de protección pre-bid, consolidando la importancia de las estrategias de verificación y optimización en un ecosistema cada vez más complejo.