Luis Aguirre de Cárcer acaba de abandonar Cadbury Schweppes tras 17 años y medio de permanencia en la compañía. Su salida se produce tras una reestructuración de la multinacional producida a escala internacional y en la que a Luis Aguirre de Cárcer se le ofrecieron unas condiciones que no fueron de su interés. Su salida se produce de común acuerdo con la empresa, en la que durante los últimos tres años prestó sus servicios en su estructura europea, primero como director internacional de la marca Orangina y en el último año compartiendo esta tarea con la de director de marketing de Schweppes en Francia. Anteriormente había ocupado sucesivos cargos en Schweppes España, el último de ellos como director general adjunto de marketing.