Son muchos los iconos que rodean a una love brand como Ikea. Más allá de productos como sus famosas albóndigas o de esa estantería que decora miles de hogares desde 1979 y que responde al nombre de Billy, se encuentra un artículo al que muchos de sus clientes recurren al llegar a la línea de cajas: Frakta, su reconocible bolsa de color azul.

Ikea ha convertido precisamente esta última en el eje de una nueva campaña en Reino Unido, mercado en el que el 45% de los ciudadanos cuenta con al menos con una de estas bolsas en su hogar. Concretamente, ubicando una versión gigante de ella (de más de 18 metros de altura y casi 40 de anchura) en la fachada del edificio de la londinense Oxford Street en el que abrirá una tienda en 2024.
La iniciativa ha sido creada por la agencia creativa británica Mother, que ha contado con Helo para la implementación de la campaña.
