La Dirección General de Tráfico (DGT) y Ogilvy han lanzado una nueva campaña de concienciación que invita a reflexionar sobre el verdadero precio de la imprudencia al volante. Bajo el concepto En un siniestro de tráfico puedes morir o perder tu vida, la acción plantea una idea incómoda y poderosa: en un accidente no solo se arriesga la propia vida, también la posibilidad de seguir viviendo en paz con uno mismo.
La pieza central de este trabajo retrata el tormento de una persona que, tras provocar un siniestro en el que fallecieron dos personas, queda marcado para siempre por la culpa y las consecuencias emocionales y sociales de sus actos. “Que una distracción al volante puede costarte la vida es algo que ya sabemos. Nos lo han ido diciendo a lo largo de los años. Lo que no se ha mostrado tanto es qué pasa con el verdugo. Nos hemos centrado en que -si sobrevive- su vida también se queda en la carretera, porque lo que viene después del siniestro, no es vivir”, señalan Guille Fernández y Pablo Poveda, directores creativos en Ogilvy.
Con este enfoque, la DGT y la agencia buscan ir más allá de los tradicionales mensajes de prevención y poner el acento en el peso psicológico que conlleva ser responsable de una tragedia vial. La campaña apela así a la responsabilidad colectiva y a la empatía, recordando que cada decisión al volante tiene un impacto humano profundo.
La producción y la difusión de la campaña
La película que articula la nueva campaña de la DGT ha sido producida por Roma y ha contado con Pablo Maestres como realizador. La fotografía ha corrido a cargo de Pablo Clemente, y en el proyecto también ha colaborado Hogarth, como agencia de producción, es Isilik, como responsable del diseño sonoro.
Morir o perder tu vida, que así se titula este trabajo, se está difundiendo en televisión, exterior y medios digitales, con un despliegue integral destinado a alcanzar a todo tipo de públicos que ha sido planificado por Iki Group.






