"De ser una estrategia planeada de antemano, es brillante. De no serlo, han conseguido convertir un enorme problema en una gran acción de comunicación". Así resume para 'Anuncios' Hugo Sáez, publicitario dedicado a estrategia de comunicación y auditoría digital, el revuelo que ha levantado la retirada de la televisión británica de un anuncio que alertaba sobre el uso del aceite de palma en alimentación.
Hugo Sáez lo explica a través de su cuenta de Twitter @Hugo_saez, en la que abrió un hilo para explicar con gran detalle lo ocurrido y que él mismo señala como “un efecto Streisand de manual: el intento de veto de un anuncio lo convierte en algo mucho más notorio de lo que en realidad es”.
En origen se trata de un spot de animación creado por la agencia londinense Mother para Greenpeace contra el uso del aceite de palma y la deforestación, pero que llegaría a la televisión británica respaldado por la cadena de alimentación Iceland Foods. Y a los pocos días saltaba la noticia en los medios, explica Sáez en su hilo: “Clearcast, la organización británica que aprueba la publicidad en el Reino Unido, anunciaba su decisión de vetar el anuncio por ser ‘demasiado político’”. La cuestión, explica el propio Sáez, es que Greenpeace está considerada una organización política en Reino Unido y la televisión de ese país no admite publicidad política.
Bien, pues a raíz de conocerse el veto, los datos recogidos por Sáez en su hilo hablan por sí solos: durante los tres meses que el vídeo estuvo alojado en Greenpeace (desde agosto) había conseguido 300.000 visitas, mientras que tras la polémica, en una sola semana cosechó más de 4 millones de visualizaciones en YouTube; 16 millones de visualizaciones y más de 200.000 retuits, además de 850.000 firmas en Change.org para pedir que el spot no fuese retirado.
Estrategia
El propio Sáez enlaza en su hilo con informaciones aparecidas en varios medios británicos sobre este hecho en los que, además, se analiza la estrategia de comunicación de Iceland Foods que, si bien en principio vio retirada su presencia en televisión, habría conseguido recuperar parte de la inversión pagada (500.000 libras) y comenzaba una nueva estrategia basada en la emisión de spots de 10 segundos en los que anuncia que sus productos no utilizan aceite de palma. Además, la compañía ha soltado orangutanes (animados) por las calles de Londres, reforzando así su notoriedad. Y cita unas declaraciones del director de marketing de Iceland, Neil Hayes en las que este directivo señala: "Hemos sido capaces de alcanzar a un enorme número de consumidores sin utilizar televisión, gracias al apoyo de famosos, los medios y el público".