En pleno boom de la inteligencia artificial generativa, Amnistía Internacional y Bar Ogilvy Lisboa han puesto en marcha una visual campaña para conmemorar los 62 años que cumple la organización y que se desarrolla bajo el concepto To protect human rights we can only count on one AI (o Para proteger los derechos humanos sólo podemos contar con una IA, en castellano).

En un momento en que la inteligencia artificial parece estar redefiniendo nuestras vidas con la promesa de ayudarnos en diferentes tareas. Una promesa que está alcanzando tal altura que incluso surgen debates sobre si será capaz de sustituir a los seres humanos. En este instante de apogeo, la ONG ha lanzado una campaña con el objetivo de recordar que todavía no hay tecnología que pueda sustituir a las personas en lo que respecta a los derechos humanos.
En este proyecto, que se está difundiendo en medios digitales e impresos, se evidencia la incapacidad de plataformas como ChatGPT para abordar problemas concretos y las verdaderas catástrofes que devastan la vida de personas en todo el mundo.
Según cuenta en una nota de prensa MiguelRalha, CEO de Bar Ogilvy Lisboa, "solo nosotros, los humanos, tenemos el poder de presionar, reclamar, denunciar, luchar. Ninguna tecnología ni algoritmo lo va a hacer por nosotros. Eso es lo que esta campaña, de forma muy sencilla, pretende mostrar”.
Además de la campaña, se ha desarrollado una landing en colaboración con The Chat Powered by People, un chat sin bot, en el que colaboran personas que trabajan en Amnistía Internacional y con las que es posible conversar y conocer un poco más sobre el trabajo que realiza la organización.